Colchones
Vas a pasar durmiendo la tercera parte de tu vida. De modo que tu colchón debería ser cómodo, agradable y saludable. Y aunque parece que la tecnología viscoelástica ha calado en la sociedad, no es la única que garantiza las mejores condiciones de higiene y descanso.
Colchones de muelles
Los colchones de muelles son los más típicos, y siguen siendo los más utilizados en España. Pero, como no podía ser de otro modo, cada vez utilizan tecnologías más eficientes.
Por eso no debes descartar esta opción, que te ofrece configuraciones ergonómicas y una vida útil muy prolongada. Estas son las posibilidades más modernas:
– Muelles de hilo continuo. Se caracterizan por utilizar una misma línea de acero que recorre el colchón a lo largo. Además suelen tener diferentes capas, que permiten un acabado personalizado al combinar tecnologías de las que hablaremos más adelante.
– Muelle pocket. Es una tecnología que goza de un siglo de vida, gracias a su firmeza y durabilidad. Su calidad es inferior a la del hilo continuo, pero son más económicos.
En definitiva, abandona los muelles bicónicos y salta a las nuevas configuraciones para disfrutar de un colchón saludable a precio razonable.
Espuma
La espuma es una opción puntera en lo que a descanso se refiere. Suelen combinarse con estructuras de muelles para aportar mayor comodidad y ventilación.
– Viscoelástica. Capaz de adaptarse a la forma del usuario, este material ha sido el no va más desde los años ochenta. Por supuesto, tiene sus detractores, pero sigue siendo muy utilizada en colchones multicapa.
– Espumas de alta resiliencia (HR). Estos materiales son muy modernos y se caracterizan por su alto grado de amortiguación y confort. Suelen combinarse con espumas más flexibles, sirviendo de núcleo a colchones de espuma.
– Látex. Este material es muy duradero y elástico, con lo que se adapta al cuerpo de un modo similar al tejido viscoelástico. Además posee propiedades transpirables e hipoalergénicas.
Geles
Has leído bien. El gel es la tecnología el descanso más avanzada. Su diseño en red mejora la comodidad y alivia la presión. Además, es increíblemente duradero y muy elástico.
Estos materiales suelen emplearse en colchones terapéuticos. Por otro lado, existen diferentes materiales en base a geles, como el biogel, el tecnogel o el intelli-gel.